Estudio de los fondos oceánicos
Antes se pensaba que los fondos oceánicos eran grandes extensiones cubiertas de sedimentos, pero cuando se empezó a estudiar el Atlántico Norte, utilizando barcos equipados con instrumentos para determinar la profundidad y equipos para extraer sedimentes y rocas del fondo marino, vieron que no era así y llegaron a las siguientes conclusiones:
En el centro de la cuenca oceánica había una gran elevación montañosa, la dorsal oceánica, con un surco central, el rift. En ella se encontraron rocas volcánicas que no estaban cubiertas de sedimentos.
La capa de sedimentos era casi inexistente en las zonas próximas a la dorsal y aumentaba desde el eje de la dorsal hacia el continente.
Los fondos oceánicos eran relativamente jóvenes y su edad aumentaba desde el eje de la dorsal hacia el continente.
También observaron que los epicentros de los terremotos de esa zona se situaban a lo largo de la dorsal y cuando miraron los del Pacífico y del Índico vieron que también seguían una línea, por lo que dedujeron que debía de haber un rift en cada océano.
En el centro de la cuenca oceánica había una gran elevación montañosa, la dorsal oceánica, con un surco central, el rift. En ella se encontraron rocas volcánicas que no estaban cubiertas de sedimentos.
La capa de sedimentos era casi inexistente en las zonas próximas a la dorsal y aumentaba desde el eje de la dorsal hacia el continente.
Los fondos oceánicos eran relativamente jóvenes y su edad aumentaba desde el eje de la dorsal hacia el continente.
También observaron que los epicentros de los terremotos de esa zona se situaban a lo largo de la dorsal y cuando miraron los del Pacífico y del Índico vieron que también seguían una línea, por lo que dedujeron que debía de haber un rift en cada océano.
Teoría de la expansión de los fondos oceánicos.
Cuando H. Hess comenzó a estudiar los fondos del Pacífico vio una serie de elevaciones volcánicas submarina de superficie plana, los guyots, alineados desde la dorsal. Supuso que eran islas volcánicas formadas en la dorsal, que se alejaban de ella a medida que se creaba suelo oceánico.
Con estos datos, los profesores Dietz y Hess enunciaron una nueva teoría, la expansión del fondo oceánico, que proponía que en la dorsal se formaba continuamente litosfera oceánica, pero no pudieron dar pruebas suficientes.
En 1962, Vine y Matthews dieron la prueba decisiva cuando estudiaron el magnetismo remanente en las rocas de los fondos, y encontraron unas bandas magnéticas paralelas y simétricas a ambos lados de la dorsal.
Estas bandas presentan el momentos de polaridad normal e invertida del campo magnético terrestre y permiten determinar el momento en que se formo ese suelo oceánico. Al ser simétricas desde la dorsal demuestran que la creación de litosfera oceánica y la expansión del fondo oceánico.
Con estos datos, los profesores Dietz y Hess enunciaron una nueva teoría, la expansión del fondo oceánico, que proponía que en la dorsal se formaba continuamente litosfera oceánica, pero no pudieron dar pruebas suficientes.
En 1962, Vine y Matthews dieron la prueba decisiva cuando estudiaron el magnetismo remanente en las rocas de los fondos, y encontraron unas bandas magnéticas paralelas y simétricas a ambos lados de la dorsal.
Estas bandas presentan el momentos de polaridad normal e invertida del campo magnético terrestre y permiten determinar el momento en que se formo ese suelo oceánico. Al ser simétricas desde la dorsal demuestran que la creación de litosfera oceánica y la expansión del fondo oceánico.